Volvió el desafío Itxabalea. Quizá la carrera más bonita y entrañable de las que se celebran en la Villa de Aoiz. Estas fechas previas a las fiestas de la localidad, las actividades se organizan a diario para personas vecinas y amigas, y como no podía ser de otro modo, el deporte no puede faltar.
Oier Goñi, gran deportista y organizador del evento, reinventó esta prueba por parejas de carácter popular, en la que una persona sube hasta Itsabalea completando un total de 4.5 kilómetros desde la plaza del Mercado, y otra baja recorriendo 4.15 kilómetros por un recorrido diferente.
Los “viejos” campeones de entonces, ven y animan a las 23 personas participantes de estos tiempos, que soportan los rigores del calor subiendo o bajando a pleno pulmón (a uno de los participantes no le salieron los cálculos y realizó todo el recorrido solo).
Familiares y amistades se dan cita en la plaza, para tomar un refrigerio y aplaudir en la llegada. Y el sol inmisericorde, imparte justicia mientras todo el mundo gana. Esto es el desafío.
Así es esta bonita carrera, en la que Oier no solo se encargó de organizar, sino también de marcar el mejor tiempo en la subida, seguramente batiendo el récord de la prueba.
La mejor pareja fue la formada por el remontista Mikel Otano y su compañero, el triatleta Ion Bermejo. Menudo currículum.
La mejor bajada fue también la realizada por Ion Bermejo con otro tiempo récord, y la mejor pareja mixta, la formada por Rita Jiménez y su viejuno padre Rubén Ximénez, gracias a la gran subida de la primera.
Todo el mundo se felicitó tras la prueba, que resultó muy reñida. Y se citó de nuevo para el año que viene.
Zorionak
